EL CERRO EL PIACHE SUS “DOS CARAS” Y DOS ACCIDENTES AÉREOS RETRATAN SU MISTICISMO

Por Leticia Rojas Rivas, @periodismodeleyenda , al cumplirse este 25 de febrero 56 años del primer accidente de la aviación comercial  en la Isla de Margarita.

Las posibilidades de que dos accidentes aéreos ocurran en un mismo sitio geográfico, en las mismas coordenadas con apenas pocos metros de diferencia en el impacto, son -según las ciencias estadísticas- de una en millones de millones. Pues bien, esto sucedió en nuestra Isla de Margarita, concretamente en la cara sur del llamado Cerro EL Piache, un lugar que siempre ha estado envuelto en enigmas y en historias misteriosas; un lugar con mucho simbolismo para los indios Guaiqueríes, pues lo utilizaban como templo para rendirles culto a los dioses; un lugar en donde los pobladores de antaño decían que en sus cuevas los mismos indios habían  encontrado la imagen de la Virgen del Valle; un lugar que nunca será olvidado por una generación de margariteños que, en dos oportunidades, fueron testigos de cómo aquél cerro se cobraba, de la manera más trágica para entonces, la vida de 72 personas.

Cerro El Piache. Cara Sur. Foto de Eleonora Mata

Si bien es cierto que la ciencia de las estadísticas nos ha proporcionado a lo largo de toda la historia “cuantificar” la realidad para poder analizar situaciones, estudiarlas y entenderlas, también es cierto que hay eventos que, de tan sorprendentes e inexplicables, escapan de significación para llegar a convertirse, empíricamente hablando, en una certeza. En aeronáutica, las estadísticas son necesarias para intentar dar explicación a los accidentes aéreos. Se toman en cuenta muchos factores, empezando por la capacitación de los tripulantes, el tipo de aeronave, el modelo, el fabricante, el año de fabricación, la ruta del vuelo, el recorrido, la velocidad promedio de vuelo, el nivel medio de vuelo, el tiempo estimado, la autonomía, el combustible, radio ayudas, dirección y velocidad del viento, nubosidad, radiación, brillo solar, precipitación, etcétera, y aunque en ambos accidentes a los que aquí nos referiremos, las condiciones meteorológicas no eran las más optimas, las dos aeronaves, una de AVENSA con 23 personas a bordo y otra de Aeropostal con 49, chocaron contra el mismo cerro e inexplicablemente, en el mismo lugar. Para entonces el aeropuerto que servía a Porlamar era el Aeródromo Luisa Cáceres de Arismendi,  que estaba dentro de la misma ciudad, y el Cerro el Piache no estaba en la ruta de los aviones que volaban en esa época.

“No entiendo qué hacían esos aviones por ahí. El cerro el Piache estaba muy lejos del aeropuerto de Porlamar, además, no es un cerro tan alto como para que un avión choque con él…”  Nos cuenta Jesús Fermín, cuyo tío falleció en el primer accidente, el de AVENSA, hace ya 56 años.

El vuelo 530 de Avensa iba para Cumaná.

El vuelo 530 de AVENSA cubría la ruta entre Porlamar y Cumaná y se estrelló en el cerro El Piache el 25 de febrero de 1962 a las 06:32 am, falleciendo sus 20 pasajeros y tres miembros de la tripulación. Era una aeronave modelo Fairchild-27 fabricado en 1958, siglas YV-C-EVH. Como antecedente curioso, se reseña que este avión se vio envuelto en un aterrizaje de emergencia en el antiguo y famoso aeródromo de Porlamar "Luisa Cáceres de Arismendi" el 22 de octubre de 1958 (apenas un mes después de su puesta en servicio). En el aterrizaje no hubo saldo trágico ni lesionados a bordo. El accidente fue producto de una falla en el tren de aterrizaje y la aeronave tuvo que aterrizar de barriga. Luego de este incidente el avión fue reparado y puesto nuevamente en servicio. Se habla de que este avión habría estado implicado en otro aterrizaje de emergencia, pero no encontramos documentado este segundo evento. 

El vuelo de Aeropostal venía de Cumaná.

Eran días lluviosos y el huracán ALMA estaba a unas 60 millas al este de Trinidad, que a su vez está a unas 490 millas de la Isla de Margarita. Si bien llovía, la velocidad del viento y las condiciones meteorológicas, no fueron motivo para suspender el tráfico aéreo ese día en el oriente del país. El miércoles 14 de agosto de 1974, 48 personas abordarían en el aeropuerto de Cumaná con destino a Porlamar, un avión Viscount 749, siglas YV-e-AMX de la línea aérea AEROPOSTAL.  A las 9:20 am la aeronave estaba en territorio insular y se estrellaba en el sector “La Gloria” del Cerro el Piache, el mismo sitio donde 12 años antes se estrellaba el  avión de AVENSA. Murieron 47 personas en el acto y un sobreviviente, el copiloto de la aeronave, moriría días después a consecuencia de las múltiples heridas y el daño cerebral ocasionado.

Este día fue de mucha conmoción y tristeza. Margarita empezaba a ser un destino turístico y comercial muy importante para la época y la frecuencia de vuelos diarios se incrementaba día a día. En este vuelo de Aeropostal murieron muchas personas conocidas a nivel regional.

“Fue un día muy triste. Yo fui con un grupo de amigos a ayudar en las labores de rescate. La escena era desoladora. Restos del fuselaje esparcidos por toda la montaña. Muchos cuerpos irreconocibles, quemados…. La escena era desoladora… Margarita no estaba acostumbrada a estas desgracias”. Nos cuenta Luís Gómez, quien con un grupo de jóvenes se aproximaron al sitio del accidente para ayudar.

“El único sobreviviente fue el copiloto, IVAN MAGALLANES, que era hijo de otro experimentado aviador de ese mismo apellido, que cuando supo que su hijo estaba vivo, contrató un avión privado y desafiando al temporal, se vino a Margarita para llevarse a su hijo a Caracas, donde estuvo recluido siete días para posteriormente fallecer” Nos cuenta Rafael Lunar. 

“Piache” significa Chamán, curandero o brujo en lengua indígena.

Ya el mismo nombre envuelve al lugar en un aura de misterio, El Cerro El Piache ha estado presente en la historia de la isla de margarita desde siempre. Allí le rezaba el Guaquerí a sus dioses y los creyentes católicos lo reconocen como un sitio santo donde se apareció la virgen por primera vez.

El Piache es un cerro con “dos caras”: la cara norte, que está orientada hacia el Valle del Espíritu Santo, colmada de verdes y de una vegetación copiosa; lugar de encuentros deportivos, pues muchas personas se reúnen allí a practicar la escalada y a explorar sus cuevas. Es un lugar que encierra una belleza impresionante, de un misticismo que asombra cuando visitas el lugar. No obstante, por la otra cara, la cara sur, donde la vegetación es escasa y xerófila, el Cerro el Piache tiene otro aspecto y cuenta otras historias…. Historias de muerte y tristeza, como las de los dos aviones siniestrados en el sector “La Gloria”.  En ese lado del cerro también está el vertedero de basura más grande de toda la isla, convertido hoy en día en un lugar lleno de inmundicia y escombros, visitado -lamentablemente- sólo por indigentes y los asiduos zamuros… Dos caras, dos formas distintas de mirar a una misma montaña, dos maneras de recordar un pasado que dejaría una marca, para siempre, en el sentir y el recordar neoespartano…