DEL POPSICLE QUE INVENTÓ POR AZAR UN CHICO DE 11 AÑOS A LA PALETTA MARGARITEÑA

Historia y fotos por Eleonora Mata M.

@PeriodismodeLeyenda

Conocer y escribir esta historia fue lo que desencadenó en #MatasietePuntoCom tener la oportunidad de conocer a los protagonistas de La Paletta Margariteña, extraordinario emprendimiento al que le queremos rendir homenaje con este sencillo texto, a través del cual también expresamos nuestro agradecimiento a la Marca y a sus Productos no sólo por resistir y persistir, sino por el empeño de crecer y evolucionar.

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El primer Popsicle fue creado en 1905 gracias al descuido de un niño de 11 años, Frank Epperson,  quien una noche de invierno dejó olvidado en el porche de su casa en San Francisco, el refresco casero que prepara con soda en polvo y que procedió a remover con una paleta de madera. A la mañana siguiente encontró una barra helada, perfectamente delineada, y tan deliciosa de chupar que causo muy pronto furor en su vecindario y en la escuela a la que acudía.

Este chico norteamericano llamó a su invento el “Epsicle” (el Carámbano de Ep o Cono de hielo de Ep). Durante mucho tiempo fue un juego artesanal y casero entre la comunidad, y más tarde, en 1923, Frank patenta su invento y gracias a la sugerencia de sus hijos pasa a llamarlo “Popsicle” (El Carámbano o Cono de Hielo de papá). Para 1928 Frank Epperson vende los derechos de su invento en 60 millones de dólares.

En nuestro país principalmente en oriente, la marca  Pop-Sicle se transformó en Posicle, muy común por cierto en la Margarita de los años 50 en adelante, y fue el término que caló en la población insular para denominar los riquísimos y refrescantes helados o paletas de hielo. Al helado de paleta elaborado de leche y recubierto de chocolate, se le dio el nombre de pastelado.

La historia del helado se remonta hasta los chinos muchos siglos antes de Jesucristo. Éstos mezclaban la nieve de las montañas con miel y frutas. Por otra parte se asegura que los Califas de Bagdad, juntaban la nieve con jugos dándole el nombre de “Sharbets” (bebida), y de de ahí salieron los deliciosos sorbetes. Se asegura incluso que el Emperador Nerón mandaba a traer nieve de Los Alpes, para elaborase una mezcla helada con especies, frutos y licor, con las cuales amenizaba sus comidas.

Otras tesis y de allí también la denominación de “Polo” al helado de Paleta, señala que el explorador Marco Polo fue quien trajo a Europa las recetas del medio oriente relativas a la elaboración de piezas heladas para refrescarse.

Los helados de leche o cremosos como les conocemos en la actualidad, nacen en Florencia alrededor del año 1500, presuntamente cuando Cosimo I de Medici encargó Bernardo Buontalenti, un arquitecto con vocación culinaria, elaborar un postre novedoso para un banquete en honor al rey de España . Este hizo servir unas cremas heladas elaboradas con la especia recién llegada de las Américas (el azúcar). Fue un éxito, y medio siglo después Catalina de Medici los difundió por las cortes de media Europa.

Más tarde en 1660, el italiano Procopio abrió en París el “Café Procope”, donde además de café servía helados, vendiéndose por primera vez al público en general los helados en forma de bebida o merengada helada a base de frutas con azúcar y jarabe. A partir de aquí los heladeros italianos, con sus puestos ambulantes, quien los dieron a conocer por el viejo continente, hasta que en 1700 cruzan el Atlántico y se expanden por los Estados Unidos. En 1846, la americana Nancy Johnson inventa la primera heladora automática y así empieza la historia del helado moderno.

LA PALETTA MARGARITEÑA

Una periodista y su esposo, más un ingeniero de computación, están detrás de esta reinterpretación que en el siglo XXI se hace del “Cono de Ed”, siendo los artífices de un producto que por sus características de combinaciones excepcionales de frutos, delicioso sabor y mercadeo emotivo, llevan un poco más de dos años sorprendiéndonos con una paleta que ya salió de las fronteras del estado, y que no cesa de innovar.

Ella, Ángela Cannava, quien después de tener a sus dos bebes en Margarita sintió que ya era el momento de ponerse a desarrollar un emprendimiento que le diera no sólo un buen sustento económico, sino que le vigorizara como profesional y le impulsara como talentosa mujer de negocio.

Él, Alfredo Mancilla, quien pensaba en partir de Venezuela, pero resultó atrapado por la idea de Ángela y de su esposo, Alexis Sánchez, quienes le mostraron la investigación que habían hecho entre tendencias de consumo que estaban marcando pauta en Latinoamérica.

-Si vivimos en Margarita donde hace mucho calor, y donde además hay frutos singulares y deliciosos, entonces por qué no crear nuestra propia Paleta. –Fue la premisa de Ángela- Y voila. La idea partió de investigar que era tendencia en Latinoamérica –confiesa-, y definitivamente entendí que esto podía funcionar en la isla. Creí que sería sencillo, pero fue difícil, complejo y muy exigente.

La Paletta Margariteña dio sus primeros pasos incursionando en la distribución de sus productos en modo “Delivery”. Posteriormente nació la primera tiendita o quiosco en el Centro Comercial La Vela, donde definitivamente se masificó ese postre helado convirtiéndose en una delicia de obligado disfrute durante cualquier visita a la isla. A lo anterior y luego de casi dos años de la primera iniciativa comercial, le siguió el quiosco de Sambil Margarita, el quiosco en la Feria del Sambil Caracas, y apenas hace unas semanas, el Día de la Virgen del Valle para ser más precisos, inauguraron su propia tienda en la avenida Aldonza Manrique de la urbanización Playa El Ángel, con ese “loook and feel” que les es tan propio basado en el uso de la madera como elemento predominante en la puesta en escena de sus espacios.

Otra área de negocio que la marca ha desarrollado con gran éxito, es su constante presencia en eventos privados, constituyéndose en un potente atractivo para el éxito de bodas, cumpleaños, aniversarios,  lanzamientos, etc.

El producto, y este es otro de sus atractivos singulares, adquiere formas variadas y simpáticas que van desde un cilindro helado, un corazón, un tornillo, una paleta con cubitos, una paleta lisa o recubierta, de tal manera que nunca es igual probarla aun cuando repitamos el sabor.

Con la promesa de “Queremos Hacerte Feliz” han logrado por demás no solo deleitarnos con la extravagancia de sus combinaciones, con los tropezones de frutas que son incrustaciones de auténtico placer, o con su colorido y nombres subyugantes, sino que además han proyectado el nombre y la identidad de nuestro terruño, han apoyado el movimiento gastronómico regional, y de un emprendimiento familiar, ya son un modelo de negocio y una manera fresca y divertida de innovar todos los días.

En la actualidad manufacturan cerca de 800 paletas por día en las versiones de hielo o cremosa, así como frutales o a base de mezclas especiales con nombres de postres como pie de parchita o pie de limón, oreo y hasta sabor a tiramisú, todas sin preservativos, sabores artificiales o químicos. Como si fuera poco, preparan combinaciones a base de bebidas alcohólicas y ofrecen manufacturar experiencias individuales según sea la solicitud que el interesado les foemule.

Otro gran protagonista de este exitoso concepto es Alexis Sánchez, el esposo de Ángela Cannava, y amigo de Alfredo Mancilla, a quien no tuvimos e placer de conocer, pero sabemos de su acompañamiento permanente a todo el equipo, y constituir una pieza clave en el engranaje de este producto que sentimos también como nuestro.

En lo personal hay sabores que me han fascinado como Tamarindo, Coco, la “Guacamaya” que es una fusión de sabores de frutas tropicales, y la preferida, Parchita con Tomate de Árbol. Además están las creaciones maravillosas de la Paletta “La Isla” con parchita y ají margariteño, o la llamada “Popsicle”… Ésta última, fue el disparador de esta historia que ha sido un verdadero placer escribir para ellos, para ustedes. QUE SIGAN LOS ÉXITOS.

“Hoy llega un nuevo sabor a nuestras tiendas! POPSICLE. Esta paletta es un regalo para nuestra Isla de Margarita y viene a conmemorar los primeros helados de paleta que ofrecían acá en la Isla cerca del año 1980 los llamados Popsicleros. Hicimos una mezcla que combina los sabores más tradicionales de esa época. Probarla es viajar en el tiempo y al mismo tiempo recargarte de frescura y sabor. Es 100% natural y no hay nada igual. Ya disponible en CC La Vela, CC Sambil y CC Parque Costazul!  #PalettaPopsicle”.

Por cierto si quieren vivir una experiencia extrasensorial, combinen la Paletta Margariteña con el trago de su preferencia....Un vino blanco, un espumante o hasta con un cóctel a base de ron, recomendándoles vivir esta atrevida integración en el @langardelaasuncion 

@lapalettamgta