HAY MOTIVOS PARA CELEBRAR: UNIMAR CUMPLE 18 AÑOS

Por Ana Requena

@PeriodismodeLeyenda

Con el ímpetu de la juventud, la valentía de los que no se rinden y el amor por nuestra insularidad como algunas de sus banderas, la Universidad de Margarita  está de fiesta.  Celebra que hace 18 años, el 24 de enero del año 2000, inició actividades académicas en El Valle del Espíritu Santo, a los pies y bajo el manto protector de nuestra Señora la Virgen del Valle.  Sin pretender ser minuciosos en su historia, conocemos que esta comienza unos años antes cuando recibió la autorización para funcionar y sus fundadores Pedro Augusto Beauperthuy, María Eugenia Morales, Raquel Pérez Henríquez, Pedro Cabello Poleo y Aníbal Gómez, acompañados por un nutrido grupo de soñadores, se dedicaron a hacer realidad al Alma Mater del Caribe.

Atravesada por el Rio El Valle, UNIMAR ocupa los terrenos de la antigua hacienda Santa Rita. A los dotes naturales de estos entornos, se le sumó el trabajo concienzudo y perfeccionista del Ingeniero Sergio Somov, quien contribuyó con su hermoso paisajismo a crear este festival visual. Al entrar en su campus, se te llenan los ojos de cientos de matices de verde palma, dátil, chaguaramo, árboles de mango y noni, entre  otras especies,  de tonos rojizos, naranjas y amarillos de crotones, palos de la felicidad  y decenas de variados arbustos que inundan sus amplios espacios abiertos.

Con su mayoría de edad, UNIMAR muestra un rostro amable y protector a quien le visita y hace vida en ella. Cada una de sus edificaciones ha sido concebida dentro de un concepto de construcción único y adaptado al entorno, uno se siente como en un pequeño pueblo. Las primeras “casas”,  que albergan aulas y oficinas administrativas, fueron pensadas y levantadas por el siempre recordado Adolfredo Marcano “Marcanito”, con sus muros blancos sobados que imitan el bahareque de las casa margariteñas tradicionales, estructura de madera y techos a dos o más aguas de tejas rojas. Los edificios más recientes se apegan a esta estética y han sido colocados intentando respetar el entorno natural.

Aunque el camino no ha sido sencillo dentro del caos e incertidumbre que vivimos en nuestro país,  la Universidad de Margarita, ha contribuido a formar el talento humano de nuestra región; abogados, ingenieros, licenciados en educación, administración, artes e idiomas modernos han egresado con éxito de sus aulas.

En UNIMAR, uno se regodea en esa sensación de creer en que si hay futuro al ver tantos jóvenes que vienen día a día a estudiar, que creen en la profesionalización como camino y que con el apoyo de sus familiares trabajan por obtener su título universitario. Como bien dice el coro de su himno, creado por el maestro Lucena quien dirige su prestigioso orfeón universitario:

“Alma Mater del bello Caribe, forjadora de hombres de bien,

universo del conocimiento, bella estrella, puerta del saber,

magna casa que siempre iluminas, los senderos de la educación,

luna llena de mi Venezuela, flor de estrellas azul redentor”

¡Feliz cumpleaños y larga vida a UNIMAR!

Nada es más digno y fecundo como sembrar una Universidad en el corazón de esta isla singular, la Esparta de la Venezuela Histórica, la Perla de Las Antillas.

Ella será Casa para el Saber y Baluarte de la Dignidad.

Aquí se colocó la primera piedra o piedra fundacional de UNIMAR.

La profesora Ana Requena en su aula.

Recibiendo a los nuevos alumnos que inician sus carreras en UNIMAR.